viernes, 9 de mayo de 2008

PARA LA PAREJA

No creas que no veo que tus ojos se achican cuando dices que me amas
Y me abrazas fuerte para yo no me escape
Y te siento tiritar con miedo de perderme.

No creas que no te veo preocupado
Cuando miras todas mis ropas anchas
Y mis arrugas tan demarcadas últimamente.

No creas que no veo mi piel color mate
Como si fuera de India
Igual que los otros enfermos renales.

No creas que no me doy cuenta
Que al cansancio crónico se ha unido la palidez,
A la falta de apetito y al aburrimiento como enferma.

No creas que no lucho diariamente contra él desanimo
Y contra la depresión por cuidarme tanto
Y siempre descubrir que tengo algo malo.

No creas que no encuentre injusto
Haber luchado toda la vida
Y cuándo podríamos disfrutarla tranquilos, pasó eso…

No creas que no percibo que tu paciencia
Cada vez está mas corta
Y que lo nuestro tal cual mi salud se está desgastando.

No creas que me duele verte amarrado a este relacionamiento
Con las intenciones de cumplir
Pero con la realidad exigiéndote cada vez más.

No creas que no me desespero
Para entrar luego en la fila del trasplante
Y poder poner fin a este deterioro diario.

No creas que también sé que puedo no ser compatible
Que algo pude resultar mal
Y que tenga que dializarme de por vida aunque no esté psicológicamente preparada.

No creas que dejaré de luchar
Y que jamás voy a demostrar lo que realmente está en mi
Para que nadie a quien amo sufra

No creas que no me trago la pena,
Que encuentro energías no sé de donde para levantarme
E intentar vivir una vida casi normal.

No creas que no agradezco tus preocupaciones,Tus noches de insomnio cuidándomeY tu presencia constante al salir de cada diálisis.

No creas que no sabré entender
Si todo eso te sobrepasa y no puedas más seguir
Porque eso es lo normal.

No creas que te voy a culpar o reprochar
Porque nadie puede estar obligado a algo –
La negación a su esencia tarde o temprano traiciona.

No creas que no pueda sola,
Aunque esté enferma no faltará opción
Para seguir con mi vida sin dependencia.

No creas que no me va doler…